Simbiosis

 

Si tú fueras cadáver tendido bajo el suelo

yo sería mármol arrellanado sobre tu cuerpo carcomido.

Si tú fueras ocaso silencioso en el horizonte

yo sería vela derretida en la mesa los domingos.

Si tú fueras librero apolillado de madera reconstituida

yo sería el libro que jamás terminabas de leer.

Si tú fueras canción sin estrofas en la radio

yo sería el sonido modulado que no para de sonar. 

Si tú fueras leche suave derramada por la nueva piel

yo sería trapo húmedo hinchado y orgulloso.

Si tú fueras cimiento, pilar, calor, cielo, colchón, paredes y hogar

yo ya no saldría, otra vez, de ti.